Creo que ya ha quedado bastante claro lo fan que soy de todos los postres que se hacen en cuestión de minutos, en formato individual y con pocos ingredientes. Me gustan porque me gustan los dulces, pero no tengo ni el tiempo ni el espacio de meterme en la cocina a hacer grandes cosas. A veces sí, pero la mayoría del tiempo no. Y no soy la única. Sé que la gente demanda postres saludables y fáciles de hacer. Y es que una cosa no está reñida con la otra. 😉
Ingredientes
- 1 plátano (banana) maduro
- 1 huevo
- 1 cucharada harina de trigo sarraceno
- 1 cucharada algarroba en polvo/harina de algarroba
- 1/2 cucharadita canela de Ceylán en polvo
- 1/2 cucharadita jengibre en polvo
- 1/4 cucharadita bicarbonato sódico
- Aceite de coco o aceite de oliva VE
Elaboración paso a paso
- En un plato hondo o bol, pon el plátano (banana) pelado y y machácalo con un tenedor hasta que se quede una papilla.
- A continuación, añade el huevo y bátelo junto con la papilla de plátano. Y cuando esté todo bien mezclado, añade la harina de sarraceno, la de algarroba, la canela, el jengibre y el bicarbonato.
- Mezcla todo muy bien con la ayuda del tenedor hasta que se quede una mezcla homogénea y sin grumos.
- Unta con aceite de coco o de oliva y con la ayuda de tus dedos un bol de desayuno, para que la mezcla no se pegue.Vierte la mezcla resultante en el bol y llévalo al microondas a máxima potencia durante 4 minutos.
- Desmolda con cuidado de no quemarte sobre un plato. Decora como quieras (frutos rocos, coco rallado, sirope…) y disfruta a tope. 🙂
